En una emotiva celebración, el pueblo de Belmez se unió para conmemorar el día de Santa Bárbara, patrona de los mineros.
En el día de hoy 4 de diciembre, la festividad comenzó con una solemne misa en la ermita de la Virgen del Castillo, donde la imagen de Santa Bárbara fue honrada por devotos y autoridades locales.
La alcaldesa de Belmez, Ana Belén Blasco Juárez, acompañada por miembros de la corporación municipal y otras autoridades, participó en la ceremonia religiosa. Posteriormente, se llevó a cabo la procesión de la venerada imagen por las calles del pueblo.
Durante la procesión, la banda de música acompañó con solemnes melodías, mientras que cohetes fueron lanzados en honor a Santa Bárbara, creando un ambiente festivo y emotivo. Los vecinos y fieles devotos se unieron al cortejo, demostrando su devoción a la patrona de los mineros.
La celebración junto a la hermandad, pusieron las medallas a los nuevos hermanos. El párroco David Arellano Agredano compartió palabras de inspiración durante la ceremonia, resaltando la importancia de Santa Bárbara en la tradición minera.
Santa Bárbara: La mártir católica de la tormenta y el rayo
Santa Bárbara, nacida en Nicomedia a principios del siglo III, enfrentó persecuciones y torturas debido a su conversión al cristianismo. Su valentía y devoción la han convertido en la patrona no solo de los mineros, sino también de otras profesiones relacionadas con explosivos, como artilleros, canteros y fundidores.
La historia de Santa Bárbara, que culminó con un acto milagroso durante su martirio, ha dejado una huella imborrable en la devoción de quienes la celebran. La festividad en Belmez no solo es un momento de reflexión espiritual, sino también una oportunidad para honrar las tradiciones y la valentía de aquellos que trabajan en industrias asociadas a la santa patrona.
Entre los milagros más conocidos de Santa Bárbara se encuentra el de la tormenta, que según la tradición ocurrió durante su martirio. Se dice que una gran tempestad se desató en Nicomedia después de que Santa Bárbara fuera decapitada, y que un rayo cayó sobre la casa de su padre, destruyéndola por completo. A partir de entonces, Santa Bárbara se convirtió en la patrona de los que sufren tormentas y calamidades naturales.