Destacan las incidencias por viento en la capital cordobesa donde se han contabilizado una treintena
El 112 ha coordinado, entre las 00:00 y las 7:30 horas, más de un centenar de incidencias causadas principalmente por el viento y por la lluvia que está dejando el paso de un nuevo frente en Andalucía, según informa el servicio adscrito a la Consejería de la Presidencia, Interior, Diálogo Social y Simplificación Administrativa de la Junta.
La mayoría de las incidencias gestionadas en las salas del 112 han venido motivados por el viento (más de 70 incidencias) y principalmente se han localizado en Córdoba capital donde se han llegado a gestionar más de una treintena de avisos. Cabe destacar que el mayor volumen de avisos se ha concentrado en un corto intervalo de tiempo, entre la 1:25 y la 1:42 donde se llegaron a atender hasta 25 incidencias. La solicitudes al 112 se han debido, sobre todo, a la caída de ramas y árboles en la vía, desplazamientos de mobiliario urbano, así como la caída de otros elementos como toldos o tejas. Destacan algunas como la caída de un árbol sobre un vehículo en la calle Fontanar, un suceso en el que no ha habido heridos. También se han atendido avisos de alertantes por la caída de árboles en diferentes calles como en la calle Pintor Losada, calle Ingeniero Juan de la Cierva, en la A-4 y en la Avenida de Cádiz.
Consejos de autoprotección
112 Andalucía ofrece una serie de consejos para evitar situaciones de emergencia en caso de fuertes rachas de viento. En primer lugar, se recomienda cerrar puertas y ventanas y retirar del exterior de las casas todos aquellos muebles y objetos (macetas, toldos, tendederos, sillas,...) que puedan caer a la calle y provocar un accidente.
En la vía pública, no debemos protegernos del viento junto a muros o tapias, y nos alejaremos de cornisas o árboles que puedan desprenderse. Se deben extremar las medidas de precaución si estamos junto de edificios en construcción o en mal estado. En días con fuertes vientos, es preferible no subir a andamios o plataformas similares que puedan verse desplazadas.
En zonas de costa, nos alejaremos de las playas y otros lugares bajos que puedan verse afectados por las elevadas mareas y oleajes.
Se aconseja evitar los desplazamientos por carreteras siempre que sea posible. Si no nos queda otro remedio, hay que respetar en todo momento las normas de circulación y mantenerse informados de la situación por fuentes oficiales. Si el fuerte viento nos sorprende durante un viaje en coche, no nos quedaremos dentro del vehículo, sino que buscaremos un lugar seguro donde poder refugiarnos.
Con lluvia y viento se debe extremar la precaución al volante, disminuir la velocidad y aumentar la distancia de seguridad. Nunca se debe cruzar por una zona inundada o con balsas de agua. Si se ha cruzado por cualquier motivo por zona anegada después hay que probar con ligeras pulsaciones los frenos para comprobar que funcionan. Si además nos vemos sorprendidos por una fuerte crecida de agua dentro del vehículo hay que prepararse para abandonarlo inmediatamente cuando el agua sobrepase el eje de la rueda.
Tampoco se debe acampar ni estacionar cerca de los cauces de los ríos aunque estén secos para evitar ser sorprendidos por una súbita crecida de agua.
Mantener la calma y seguir las informaciones de fuentes oficiales en redes sociales y medios de comunicación ayuda a evitar rumores y falsas informaciones y en caso de emergencia, llamar al 112, servicio disponible las 24 horas, todos los días del año.