El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Pozoblanco (Córdoba) ha condenado a una multa de 900 euros a un vecino de Villanueva del Duque como autor de un delito leve de amenazas cometido en las redes sociales sobre dos guardias civiles destinados en los puestos de Villanueva del Duque y Alcaracejos.
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Pozoblanco (Córdoba) ha condenado a una multa de 900 euros a un vecino de Villanueva del Duque como autor de un delito leve de amenazas cometido en las redes sociales sobre dos guardias civiles destinados en los puestos de Villanueva del Duque y Alcaracejos.
Según se describe en la sentencia sobre la que informa la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), cuyos servicios jurídicos han asesorado y representado a los dos agentes, los hechos tuvieron lugar en el mes de marzo, cuando el referido individuo publicó cuatro vídeos en la red social 'TikTok', que también fueron difundidos mediante la aplicación 'WhatsApp', en los cuales aludía a dos guardias civiles sin concretar sus nombres, pero "ofreciendo detalles suficientes para saber que se dirigía a ellos".
En dichos videos expresaba amenazas, calumnias e injurias contra los dos agentes, como consecuencia de varias actuaciones policiales llevadas a cabo en días anteriores.
El abogado Álvaro Moreno, quien ha asistido a los agentes, ha declarado que "lo más relevante de esta sentencia no es la cuantía de la condena impuesta, sino el mensaje que se transmite a quienes en el futuro se planteen utilizar las redes sociales para amenazar, insultar o calumniar a los guardias civiles", porque la Asociación Unificada de Guardias Civiles estará "vigilante" y llevará a cabo "las acciones judiciales necesarias para que no les salga gratis".
Al respecto, AUGC lleva años reclamando que "se agraven las penas por agresiones a guardias civiles y que se refuerce su protección jurídica, y en ese agravamiento deberían incluirse los delitos por hechos como estos ocurridos en Villanueva del Duque, porque las amenazas, insultos, calumnias e injurias a que se enfrentan los agentes habitualmente son también formas de agresión y coacción para que los guardias civiles no desempeñen adecuadamente su trabajo".
Fuentes: La Vanguardia